Desatención, reclamación de un vecino de Carabanchel a la junta municipal de Carabanchel.

Desatención a las personas mayores en centros de mayores Carabanchel

reclamación a la junta municipal de Carabanchel
 

Desatención. El número 47 de A Voces de Carabanchel, septiembre del 2018, página número diez, Ventana de Salud de Carabanchel. Tu centro de salud informa, artículo El camino hacia la felicidad y una mejor salud. Muchas gracias a todo el personal del centro de salud por dejar muy claro todos los beneficios que reporta el ejercicio físico, que hace feliz al corazón, despeja la mente y aligera el cuerpo. Mantiene y mejora la condición física general de las personas mayores. Espero que la señora concejala y los Servicios Sociales hayan leído el citado artículo y tomen buena nota de ello.

Le recuerdo a la señora concejala que los Servicios Sociales fallan. Están enfermos, con escaso presupuesto, sin contestar ni atender las quejas o reclamaciones. Los síntomas son muy claros: masificación, listas de espera, etc. Como norma general, en los centros de mayores, donde se imparten talleres de gimnasia de mantenimiento para las personas mayores, éstos se realizan en locales poco aptos e inadecuados, con falta de material de todo tipo para desarrollar la actividad programada, produciéndose un agravio comparativo con otros centros municipales que sí lo tienen. Está comprobado que, gobierne quien gobierne, a los mayores nadie los atiende: solo se preocupan cada cuatro años, cuando nos piden el voto. Triste, cierta y penosa realidad.

Mención aparte merece el exceso de vacaciones que tenemos a lo largo del año: unos seis meses. Verano de junio a octubre; Navidad y Reyes, otro mes; “semanas de”, “días de”, puentes, etc. Y todo ello por no pagar a un monitor o monitora de gimnasia a la contrata que regenta estas actividades. Que quizá sea la misma que no suministra en tiempo y forma el jabón y el papel para lavarse y secarse las manos, nueve meses para subsanar una avería en la sala de gimnasia que se reparó en una semana, etc. La desconfianza y el desencanto de las personas mayores, el silencio cómplice de las juntas directivas y el pasotismo de los Servicios Sociales hacen muy poco para corregirlo.

Todo lo expuesto anteriormente lo puse en conocimiento por escrito a la señora concejala, escrito que cursé por registro el día 12 de febrero del año en curso, número de anotación 2018/0149997. A fecha de hoy, no he recibido respuesta. Así es como tratan a las personas mayores. Con razón se dice que en este país reclamar o denunciar es llorar o rezar si eres creyente. Por lo que puedo afirmar, sin lugar a error, que se comportan igual los políticos de izquierdas que los de derechas o viceversa: gobierne quien gobierne, siempre pagamos los más débiles y desprotegidos. No deberíamos tolerar dichas desatenciones. “País de charanga y pandereta”, que decía don Antonio Machado.

Santiago Bustos Fernández

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