Fotos R. Fernández y N. Pérez
En Madrid, el apoyo y la petición de pasillos seguros para los refugiados ha juntado a personas de cualquier perfil. Todos unidos por la solidaridad.


La compositiva humana de la convocatoria nos recordaba, siendo mucho menos numerosa pero con muchos manifestantes también, al No a la Guerra. Algo que nos parece una excelente noticia.
Los manifestantes gritaban el NINGÚN SER HUMANO ES ILEGAL, que nos acompaña desde hace 20 añós, junto a otros eslóganes pidendo abrir las fronteras, eliminar las vallas y que los gobernantes se pongan a la altura solidaria de buena parte de la población europea.
Durante el acto, se ha leído el comunicado firmado por las diferentes organizaciones convocantes.
Y todo ha terminado con la actuación de la Solfónica y la música de músicos senegaleses.