En esta ocasión nos toca poner una piedra en favor de la identidad patrimonial del barrio.
El otro día se reía con silenciosa sorna un vecino cuando señalaba a la recientemente lavada fachada del nº14 de la Avda. de Carabanchel Alto. Comentaba sobre la placa romboide informativa, donde se puede leer: “Aquí estuvo el primer ayuntamiento de Carabanchel Alto hasta 1948, en que se anexionó a Madrid”. El vecino nos descubrió que la placa tenía una errata importante: el edificio se correspondía con el último Ayuntamiento y no con el primero. Un pequeño error que nadie ha corregido en los años que lleva colocada.
Lamentablemente, este hecho no es el único observable. En Carabanchel parece haber una escandalosa falta de reconocimiento patrimonial. O bien faltan señalamientos importantes, o bien están equivocados o simplemente señalan hechos absolutamente intrascendentes.
Así, a menos de 200 metros del “primer” Ayuntamiento hay otra placa en la fachada trasera de la parroquia de San Pedro que reza que en ese lugar se situaba la anterior iglesia mudéjar de la misma devoción, construida en el siglo X, cuando en realidad fue cinco siglos más tarde. Además del “despiste”, olvidan reconocer la importancia de la torre del campanario, del siglo XVIII.
Y si esto nos alarma, a ver qué opinan cuando visiten la ermita de Santa María La Antigua y descubran que la placa de la fachada, lejos de exponer la importancia del edificio por su antigüedad, se dedica a glosar una leyenda faunística sobre el santo patrón de Madrid. Un claro ejemplo de que a algunos parece importarles más un chascarrillo religioso que la veracidad histórica de una joya arquitectónica singular.
Afortunadamente, algunas entidades vecinales y culturales sí se toman muy en serio esta cuestión. Son ellas las que han debido tomar la iniciativa de la defensa patrimonial en todas sus variantes. Y decimos iniciativa con toda la razón.
Es el caso de Karabanchel.com. Gracias a sus placas amarillas alternativas, hemos conocido muchos de nuestros hitos históricos. Lamentablemente, no todas permanecen, ya que parece haber más interés en retirarlas que en asumir la evidencia y sustituirlas, si se quiere, por placas oficiales.
Otro buen ejemplo es el último acto conmemorativo realizado en la nueva plaza de Mesonero Romanos, donde la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto, la Mesa del Árbol y la entidad anterior no solo han colocado una placa que señala el nombre de la plaza, sino que además han dispuesto dos paneles informativos sobre el homenajeado (ver foto). Un auténtico placer para la vecindad curiosa y ávida de saber.
De verdad, ¿costaría tanto hacer un repaso de las acciones informativas del Ayuntamiento, ahora que les hemos evidenciado unos pocos casos? Por favor, un poquito de rigor. Si no, podría parecer que tienen muy poco interés por la historia y el patrimonio de este barrio, como la vecindad opina. De momento, tienen ustedes un suspenso en historia carabanchelera.
Si quieres que comentemos sobre algún hecho urbanístico que te afecta, escribe a pupu2129@yahoo.es, a la atención de nuestra columna.
