El empleo se destruye más entre los hombres y en el sector servicios.
La pandemia ha dejado a cientos de miles de trabajadores y trabajadoras en el paro, es decir; los ha condenado al desempleo, y con ellas a la mayor parte de sus familias. El virus inclemente ha echado literalmente el cierre “en los hechos” de cientos de empresas producto de la emergencia sanitaria y sus consecuencias posteriores. Las predicciones no son nada halagüeñas y prevé un futuro incierto en Europa y el Mundo entero.
Según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) la subida del paro en el primer trimestre de 2020 afectó a ambos sexos, aunque en mayor medida a las mujeres. En concreto, el desempleo femenino se incrementó en 62.900 mujeres (+3,7%), frente a un repunte del paro masculino de 58.100 varones (+3,8%).
Según la EPA la tasa del paro en las mujeres aumentó casi siete décimas, hasta el 16,24%, mientras que la masculina subió medio punto, hasta el 12,79%. Al contrario de lo ocurrido con el desempleo, la destrucción de empleo registrada en el primer trimestre fue menor entre las mujeres. Así, mientras que los hombres perdieron 147.400 puestos de trabajo entre enero y marzo (-1,3%), la ocupación femenina se redujo en 138.200 mujeres (-1,5%).
La encuesta también destaca que por sectores el desempleo subió en los servicios, con 172.800 parados más (+14,8%), su mayor repunte en once años, y en la industria, con 15.100 desempleados más (+9,4%). Por contra, bajó en los parados de larga duración en 32.900 desempleados; en la agricultura (-19.700 parados, -10,7%); en la construcción (-9.600 parados, -6,6%), y en el colectivo de quienes buscan su primer empleo (-4.700 desempleados, -1,5%).
Por su parte, la destrucción de empleo en el primer trimestre afectó mayoritariamente al sector servicios, que perdió 275.900 puestos de trabajo (-1,8%), su mayor retroceso desde el cuarto trimestre de 2011. Por su parte, la agricultura destruyó 9.100 empleos en el trimestre (-1,1%) y la construcción perdió 6.200 ocupados (-0,5%). Por otro lado, los trabajadores por cuenta propia disminuyeron hasta marzo en 2.200 personas (-0,07%), lo que situó el número total de autónomos en 3.109.800 personas.
La cifra lapidaria: “el paro subió al 14,4% en el primer trimestre del año”. Aunque el INE no recoge en su totalidad el impacto total de la crisis sanitaria del coronavirus en el mercado laboral, faltan datos concluyentes de los ERTES que se presume sumaran unos 285.600 trabajadores. Según la metodología de la EPA estos todavía se consideran ocupados mientras dicha suspensión sea inferior a tres meses. Aun así, son los peores resultados para este periodo del año desde 2013, con 121.000 parados más y 285.600 empleos destruidos entre enero y marzo.
Por otra parte la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sostiene que la crisis creada por el coronavirus tendrá efectos de gran alcance en el mercado laboral, se estima que entre “5,3 y 24,7 millones de personas perderán su empleo en el mundo”. En comparación con la crisis financiera mundial de 2008-2009 donde el desempleo mundial aumentó en 22 millones.
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