No solo ha sido el volver al aire libre, con los niños al hombro y sin mascarilla. Ha sido un regreso a cierta normalidad, tímida aún, pero sobre todo a poner nuevamente en marcha los deseos y los sueños, siempre con el ánimo de recuperar las energías perdidas en la pandemia. De este talante ha sido Colebanchel, una apuesta por el futuro de la educación pública en Carabanchel auspiciada por las asociaciones de familias del alumnado (AFA) de este distrito, que desde hace un buen tiempo trabajan en forma coordinada para enfrentar los problemas que a todos afectan por igual.
A las doce del mediodía del 27 de marzo, como estaba previsto, se dio el chupinazo inicial a estas actividades en el Parque de Comillas. Al calor de la animación del grupo artístico Yo Soy Ratón, cientos de padres de familia, adolescentes, niños de todas las edades y los propios vecinos, se vieron involucrados en los planes de las AFA de unirse para reclamar la construcción de un polideportivo y la pacificación de los centros educativos, al mismo tiempo que se informaban sobre todas las ofertas pedagógicas que tienen los centros escolares, la diversidad de programas y los recursos para llevarlos adelante.
Talleres de pintura, huerto, robótica, artes en general y la lectura de cuentos, pero sobre todo al son del último disco de Yo Soy Ratón, los asistentes entraron en una especie de reclamación propia de todas las peticiones de los organizadores. Con palmas, bailes y gritos, la fiesta fue lo que siempre ha sido: “Una referencia anual para el barrio y para la escuela pública”. De esta manera, Ama la libertad, la canción que el grupo animador adaptó para apoyar estos propósitos de las AFA, se sintió con fuerza y emoción en todos los asistentes.
👏No cabe duda que COLEBANCHEL se convertirá en un referente y un pilar fundamental de la escuela pública en los próximos años#EducacionPublica #Carabanchel #Colebanchel pic.twitter.com/Ni40xXGsCX
— avocesdecarabanchel (@avocesdecaraban) March 27, 2022
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