El pasado 17 de abril acudimos como plataforma Salvemos Eugenia de Montijo a la reunión mantenida en las instalaciones del SIEPSE entre distintos colectivos y asociaciones de vecinos con los técnicos de dicha empresa pública encargados del proyecto, y con la presencia de varios concejales socialistas de Carabanchel y Aluche. El SIEPSE es el organismo estatal promotor del proyecto de urbanización “Plan Parcial de reforma interior apr11.01, cárcel de Carabanchel”.
En el encuentro se informó sobre las últimas modificaciones realizadas sobre el plan original. Como suele ser habitual, la realidad que sigue existiendo no es ni mucho menos un éxito para las demandas vecinales, y aquí les exponemos nuestra valoración sobre lo expuesto:
— “Con esta modificación se elimina la vía que atraviesa el parque Eugenia de Montijo”.
La vía no se elimina. Solo se modifica una pequeña parte de la misma (la que va desde la calle Pingüino hasta la calle Monseñor Óscar Romero) tras el dictamen de la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid dada la importancia de los restos arqueológicos encontrados en dicho tramo (un acueducto romano único en la ciudad de Madrid). Dichos restos quedarán en el subsuelo de lo que será un corredor verde.
Del resto del vial: el tramo desde la avenida de los Poblados hasta la misma calle Pingüino se mantiene inexplicablemente, puesto que una vía de cuatro carriles no es en absoluto necesaria para el acceso a las parcelas residenciales, además del impacto que provocarán en el parque y sobre la vegetación arbórea existente.
El que va desde Monseñor Oscar Romero a Nuestra Señora de la Luz permanece, sabedores de que es de competencia exclusiva del Ayuntamiento, el cual mantiene la intención de construir la vía, como ya ha expresado el concejal Carlos Izquierdo, en conversaciones con SEM.
Especialmente grave sigue siendo el proyecto de la rotonda, que con sus 60 metros de diámetro y la conexión con la calle Pingüino divide el actual parque en dos mitades.
— “Se ha diseñado un espacio paisajístico adecuado para el entorno de la ermita”.
En absoluto es el espacio necesario. Las imágenes “idílicas” muestran, convenientemente, visiones de espacios ajardinados frente a la fachada sur de la ermita.
Estas visiones “distópicas” parecen pretender evitar mostrar el futuro edificio de viviendas y comercios de siete plantas que, inexplicablemente, quieren construir dentro del entorno protegido de la ermita, a escasos metros de la misma, obviando el carácter de hito paisajístico que es esta joya del patrimonio.
Por otra parte, es evidente que este espacio diseñado hace tabula rasa sobre el ámbito de la Vereda, y el diseño no responde en absoluto a las propias demandas de uso de ese espacio en el futuro, que requiere de espacios de actividad.
— “Se mejora la conectividad de vehículos con la calle Ocaña”.
A costa de la Vereda de Aluche, que será invadida por el carril que conectará la rotonda de la calle Pingüino con Ocaña, dejándola según el plano en un callejón sin salida y estrangulándola en el ángulo del cementerio más cercano a la trinchera del metro.
— “Mejoras significativas para el proyecto y la vecindad”.
Depende para quién. En cuanto al resto del proyecto de los terrenos de la cárcel, no ha sido modificado ni un milímetro y lo que estaba aprobado sigue en pie, no se ha hablado de equipamientos sociales de ningún tipo. Por tanto, permanecen en el proyecto el CIE, las oficinas de instituciones penitenciarias, las más de 600 viviendas… y por supuesto todos los viarios que se reflejaban en el proyecto aprobado el 28 de septiembre de 2023 en el pleno del Ayuntamiento.
— Y además…
No tienen previsto ampliar el porcentaje de viviendas protegidas, muy inferior al de otras operaciones similares, por ejemplo la cercana Operación Campamento. Ese porcentaje, en términos de edificabilidad, es del 32,71% del total dedicado a “residencial”.
— Por todo lo expuesto…
No nos engañemos ni dejemos que nos engañen. Hay que seguir luchando por nuestras reivindicaciones. Creemos que lo presentado da esperanzas de que se pueda modificar este proyecto y acercarlo a las demandas vecinales. Desde luego, los cambios presentados distan de ser las mejoras que los vecinos esperan y se merecen.
Foto: Montaje del edificio y la ermita (interpretación aproximada).
