Jueves 9 de octubre, a las 19:00, concentración ante el Centro de Salud Abrantes
La existencia de un sistema sanitario y de unos servicios públicos de calidad es fundamental para nuestras condiciones de vida. Por eso es tan importante organizarnos y plantar cara a quien desea destruirlo. Por eso, este jueves, 9 de octubre, volvemos a convocar al vecindario del barrio de Abrantes y del resto de Carabanchel a denunciar el abandono deliberado de la sanidad pública madrileña por parte de la Comunidad de Madrid.
La política sostenida de abandono y desmantelamiento de la sanidad pública ha desembocado en una falta de personal médico endémica en el Servicio Madrileño de Salud y es una de las causas principales de que en la Comunidad de Madrid haya, según cifras de la propia Consejería de Sanidad, haya actualmente (datos de finales de agosto) 1.020.739 pacientes en lista de espera para ser atendidas.
Es necesario y urgente tomar medidas para reforzar el sistema sanitario público, y especialmente la Atención Primaria y sus centros de salud. Su acelerada degradación es consecuencia de decisiones políticas, de no destinar a la sanidad pública los recursos suficientes para dotar a ésta de los medios necesarios. Y tales decisiones políticas son el resultado de no otorgar a la salud de la población prioridad sobre otro tipo de gasto.
Por eso queremos resaltar el trabajo que en el conjunto de la Comunidad está realizando la coordinadora Vecinas y Vecinos de Barrios y Pueblos de Madrid, que agrupa a diferentes plataformas de lucha en defensa de la sanidad pública y que nace de las movilizaciones descentralizadas y regulares que desde hace años se producen por toda la región de Madrid. Esta coordinadora desarrolla una campaña, “¡Reclama!”, cuyo principal fin es sensibilizar a la gente de que “Reclamar es un derecho y un deber”, que nace en 2024 para informar y empoderar a la ciudadanía sobre su derecho a reclamar una sanidad pública de calidad. El movimiento surge de una situación crítica de la sanidad pública madrileña, que se arrastra desde hace ya dos décadas y que la pandemia puso en evidencia. En Carabanchel llevamos ya meses instalando mesas ante el Centro de Salud de Abrantes para recoger los testimonios y reclamaciones de su vecindario.
Hace unos días Vecinas y Vecinos de Barrios y Pueblos de Madrid estimaba que esta iniciativa vecinal había logrado un aumento del 127% en las reclamaciones oficiales en 2024, denunciando listas de espera masivas, falta de médicos y la desigualdad entre distritos. El objetivo de la campaña es doble: concienciar sobre el grave deterioro del sistema sanitario público y recoger reclamaciones masivas para exigir a la Consejería de Sanidad que tome medidas urgentes. Hasta la fecha, la plataforma ya ha registrado y enviado a la consejera de Sanidad aproximadamente 30.000 reclamaciones, sin haber obtenido ninguna respuesta tras más de un año de espera.
Pese a que la Administración madrileña ignora la voz de 30.000 personas que piden ayuda la eficacia de la campaña se ve reflejada en los datos oficiales. Según información solicitada al Portal de Transparencia de la Comunidad de Madrid, en 2023 se presentaron 34.694 reclamaciones. Sin embargo, en el año 2024 la cifra ascendió a 78.703, lo que supone un incremento del 127% y demuestra la gran incidencia y movilización ciudadana generada por “¡Reclama!”.
Mientras, la Comunidad de Madrid, la más rica de España, recorta en sanidad: el presupuesto madrileño de 2025 destina 1.482,25 euros por habitante a gasto sanitario, muy por debajo de la media española presupuestada para 2025, que es de 1.944 euros.
No queremos normalizar ni aceptar que tengamos que esperar semanas para que nos atienda el o la médica de cabecera. No queremos normalizar ni aceptar que tengamos estar meses esperando una consulta preferente con el especialista para la que ni siquiera nos dan cita. Somos miles de usuarios y usuarias de la sanidad pública madrileña abandonadas por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Ésta es la injusta realidad de los barrios de clases trabajadoras y populares.
Luchemos por una sanidad pública, universal y de calidad, no solo para el barrio, sino para toda la Comunidad de Madrid. Estamos hablando de una cuestión de derechos y de salud. ¡La sanidad no se vende, se defiende! ¡No a la privatización, sí a la sanidad para todas!