Hace unos días Telemadrid alertaba en sus informativos de un incremento en los robos de los catalizadores de los coches en la zona de Carabanchel. Desde A Voces quisimos corroborar la noticia y, para ello, hemos hablado con varios talleres del barrio.
El catalizador es un dispositivo que se encuentra dentro del tubo de escape, y su principal función es la de disminuir la contaminación que se produce al expulsar los gases al exterior del vehículo. Este sistema es imprescindible para la circulación de los coches de combustión interna, pues su ausencia puede tener graves repercusiones en el medio ambiente y conlleva sanciones. En Carabanchel, varios talleres han corroborado que sí que hay una alerta a causa del aumento en los robos de catalizadores.
‘’Se roban muchos catalizadores, nos llegan bastantes casos en los últimos meses. Incluso a mí mismo me robaron uno’’, afirma el dueño del primer taller. La respuesta es parecida en casi todos los talleres, se conoce este fenómeno desde cerca y los mecánicos han atendido varios casos de robos de catalizadores en la zona de Carabanchel, aunque se conoce que esta problemática también se da en otros puntos de Madrid.
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Los catalizadores son valiosos por los metales que llevan en su interior: paladio, rodio y platino, siendo este último más caro y pesado que el oro. ‘’Hemos tenido dos clientes en la última semana y media con este problema. Hay muchos casos de personas que se buscan la vida robando este tipo de dispositivos’’, comenta uno de los mecánicos que trabaja en Carabanchel. Varios de estos trabajadores también argumentan que suelen ser grupos de personas especializadas en este tipo de robos, pero uno de los dueños especifica que puede que no lleguen a ser bandas organizadas como tal. Tras el robo, los delincuentes los venden por precios que varían desde los 70 hasta los 260 euros, aunque en algunos casos alcanzan el valor de 500 euros. Para la víctima, reponer el catalizador supone un coste que oscila entre los 300 y 700 euros, dependiendo del vehículo, y sin incluir la mano de obra, cuyo coste va aparte.
Más de la mitad de los talleres que nos han contestado afirman que en la última semana han atendido a, mínimo, dos clientes que acudían a su negocio por un robo del catalizador. El resto de encuestados aseguran que, aunque ellos no han tenido muchos casos en su taller, sí que conocen a personas de su entorno que les ha sucedido, tanto a amigos como a compañeros del gremio que sí que resuelven muchos de estos casos en sus negocios. Tan solo uno de los talleres ha afirmado no haber atendido ningún caso últimamente, y aunque conozca el fenómeno, no lo conoce de cerca.
Además, los mecánicos aseguran que este fenómeno no es nuevo, puesto que todos los años se producen robos de catalizadores. ‘’Siempre nos llegaban cinco o seis casos al año’’, afirma uno de los mecánicos. Sin embargo, en los talleres han corroborado que, aunque esto ya se producía años atrás, los robos han aumentado exponencialmente en los últimos meses, en respuesta a la situación económica que se vive en los barrios hoy día.
Los robos de catalizadores constituyen una nueva alarma y problemática para los vecinos de Carabanchel, cuya única opción parece ser la de guardar su coche en un garaje. ‘’Lo mejor es no dejar los coches aparcados en la calle’’, aconseja uno de los dueños de los talleres. Conscientes de que esta solución es imposible para la mayoría de los vecinos, los mecánicos no pueden ofrecer muchos más consejos, aparte de ese y de escuchar bien el ruido del vehículo al arrancar, porque si se oye un sonido extraño y fuerte, es uno de los primeros indicios del robo. Se trata de otra problemática social que se espera que se detenga y resuelva lo antes posible.
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