En el número de A Voces de Carabanchel del pasado mes de mayo de 2022 se publicó una noticia firmada por la Junta Municipal del Distrito de Carabanchel titulada Opañel recupera la zona abandonada de las piscinas de San Miguel. En la noticia se explicaba la decisión de las autoridades de la ciudad de modificar las normas urbanísticas para permitir la construcción de viviendas en estos terrenos. Por medio de la presente nota, desde la Asociación Vecinal Parque de Comillas queremos completar la información ofrecida en el artículo mencionado realizando las siguientes puntualizaciones:
— El artículo, a nuestro juicio, no refleja de forma suficientemente clara que por medio de esta operación se recalifica un terreno actualmente reservado para un uso deportivo. El Plan General de Urbanismo actualmente vigente (PGOUM) estableció para este terreno un uso deportivo que el Ayuntamiento convierte ahora en un uso residencial para permitir así la construcción de viviendas.
— En nuestra opinión tampoco se menciona de una forma clara que el beneficiario de esta operación es la Iglesia católica, titular último de los terrenos a través de la entidad Hermandades del Trabajo.
— Tampoco se deja claro que las contraprestaciones que se mencionan en el artículo en forma de cesión de suelo no suponen ninguna gracia, sino que cumplen lo establecido en la ley para la urbanización de cualquier ámbito urbanístico.
En consecuencia, considerando toda la información, desde la Asociación Vecinal Parque de Comillas presentamos el pasado mes de mayo alegaciones ante esta operación urbanística. Las alegaciones parten de la consideración de que la modificación urbanística planteada no obedece en ningún caso a un interés general, sino a un interés puramente particular y económico. Además, en las alegaciones se expresaban dudas sobre la legalidad del procedimiento realizado desde el punto de vista técnico. Al margen de lo anterior, se realizaron las siguientes alegaciones en relación con el fondo de la cuestión:
— En primer lugar, se solicitó que la modificación de uso del terreno se realizara para su utilización para otro equipamiento de los muchos que necesita la zona (centro de mayores, centro de salud o escuela infantil, entre otras posibilidades). Igualmente se contempló en las alegaciones que se pudiera mantener la actual calificación del terreno como deportivo, de modo que se dedicara a equipamientos de ese tipo, por ejemplo para una piscina de verano. Estas alegaciones se justifican en gran parte en el propio expediente urbanístico del Ayuntamiento, que hace mención a la falta de equipamientos en el barrio.
— En segundo lugar, se solicitó que en caso de continuar con la recalificación se debería reducir la edificabilidad, a todas luces excesiva en nuestra opinión, de modo que la construcción de nuevas viviendas no sobrecargase en exceso unos equipamientos que ya en el momento actual resultan insuficientes para la población actual.
Hasta mediados de octubre de 2022 no se había recibido respuesta a las mencionadas alegaciones. En la asociación vecinal nos consta que algún partido político también ha realizado alegaciones contra esta recalificación. En este momento solo nos queda esperar una respuesta por parte del Ayuntamiento y confiar en que esta operación urbanística sea modificada de modo que pueda ser beneficiosa para la ciudadanía en su conjunto y no meramente para el titular de los terrenos, que con la propuesta actual sería el único beneficiado. En nuestra opinión, resultaría difícil de entender que, en un barrio con tantas necesidades de equipamientos, como el propio Ayuntamiento reconoce en el expediente, se autorizaran más viviendas en uno de los pocos terrenos que, hasta ahora, estaban destinados a esos tan necesarios equipamientos.
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