La quiebra de la empresa Educo ha supuesto el abandono de muchos centros de mayores, respuesta tardía de la Comunidad de Madrid y vecinos sin talleres
Qué injustos y olvidadizos somos con nuestros mayores. Esos que nos cuidan igual que el primer día, llevan a los nietos al parque y nos preparan ese guiso favorito cuya receta pasa de generación en generación, aunque luego no nos va a quedar igual de rico, por más que lo intentemos.
Si ya es triste que nosotros a veces les olvidemos, ya sea por el trabajo, los quehaceres o el ajetreo ciudadano. ¿Qué nos podemos esperar de las instituciones?
Desde julio de este 2025 varios centros de mayores y espacios culturales se han visto afectados por la quiebra de Educo, la empresa que los gestionaba. Ésta se declaró en concurso de acreedores ese mismo mes. Y este verano más de 400 trabajadores reclamaban las nóminas e impagos acontecidos desde junio, una incertidumbre y varias preguntas sin respuesta cubrían varios centros de Madrid.
Zonas como el Retiro o el Centro Cultural Casa del Reloj en Arganzuela han sufrido las consecuencias. Sin embargo, un distrito que se ha visto muy afectado es el de Carabanchel, con un total de cinco centros de mayores en vilo. Hay algunos vecinos que a día de hoy reclaman: “Estamos viendo a ver qué pasa aún, nosotros queremos que se haga cargo el Ayuntamiento de Madrid o alguna empresa, y que también se responsabilicen y admitan a todos los empleados que están parados”.
Este vecino es del centro de San Vicente de Paul, donde se han suspendido diversas actividades: desde danza, clases para el manejo de teléfonos móviles y hasta servicios psicológicos, entre otros. Servicios que son imprescindibles para nuestros mayores, ya que, además de ofrecer compañía y atención en algunos casos en situaciones de vulnerabilidad, también suponen una forma de mantener las mentes ágiles y activas.
El pasado 11 de septiembre hubo pleno del Distrito, donde los partidos políticos expresaban sus propuestas. Entre ellas se encontró la pregunta de: “¿Qué va a ocurrir con estos centros y a qué se debe la poca y tardía actuación del Ayuntamiento de Madrid?”. Tras la puerta de la junta se encontraban reunidos varios manifestantes afectados de estos centros, a los cuales no se les permitió el paso, a pesar de ser un acto público.
Por otro lado, muchas empresas no se quieren hacer cargo de la problemática debido a las cuantiosas deudas de Educo. Y el pasado mes de septiembre, desde el Ayuntamiento de Madrid, el alcalde José Luis Martínez-Almeida manifestó que “estamos trabajando en ello”.
Según varios indicios, la situación parece intentar solventarse de cara a octubre. Relegándola así a un cuarto plano, después de cuatro meses y todo el verano. Sin atención, sin escucha y sin una respuesta a tiempo.